
¿Has tenido una epifanía alguna vez?
Te ronda la cabeza la idea de resolver diferentes inquietudes a las que has intuido una salida. Un amigo llamaría a esto una epifanía, darse cuenta de repente de una idea. ¡Grandilocuente! Como si te lo hubieran soplado al oído de una vez, porque nunca te lo habías planteado, se bosqueja hoy al despertar una idea luminosa, como una luz intermitente de atención. Reflexionas íntimamente ¿será esta tu solución, una solución integral, que hace encaje a tus necesidades económicas,